Variables de precio, novedad, calidad, conveniencia, desempeño y reducción de costos, entre otras cosas, son consideradas para idear un elemento diferenciador dentro de una iniciativa de mercado.
De manera dinámica y fluida se dio vida a la sesión N°6 del Programa de Emprendimiento impulsado por la Pre Incubadora de Negocios del Centro de Innovación, VECTOR. Esta jornada, continúo con el ciclo de charlas que semana a semana va tocando una temática importante para la conformación de un proyecto de mercado, siendo el “Diseño de Propuesta de Valor”, el “plato principal” de esta nueva convocatoria.
Diferenciarse del resto, generar un valor agregado a tu producto y/o servicio, y marcar tendencia en ciertas soluciones planteadas, son sólo algunos de los factores a considerar que se tocaron en este nuevo taller que tuvo como objetivo orientar a los estudiantes de la Universidad de Santiago en el diseño de una idea innovadora para sus proyectos emprendimiento.
Pelayo Achondo, publicista e ingeniero comercial de la Universidad del Desarrollo, y director regional de desarrollo de TECHO, fue el encargado de encaminar por medio de preguntas a los participantes, los lineamientos necesarios para identificar y crear una correcta propuesta de valor.
Bajo esta dinámica, el facilitador, comentó que las condiciones actuales en la que nos encontramos y el pasar natural del tiempo han ido cambiando los requerimientos y volviendo más exigente las necesidades y propuestas de valor que la sociedad espera de las empresas. “Hoy existe mucha información dando vuelta en la red y son varias las plataformas digitales las que evidencian este mayor contenido, incrementado así el nivel de pretensiones que tiene la gente sobre los productos y servicios que les ofrecen las compañías”.
“Estamos en un contexto donde las empresas que digitalizaron su proyecto hoy día, están mucho mejor paradas que otras. La pandemia vino de golpe, y si hay empresas que actualmente no están digitalizadas, o no están apuntando al e-comerce, hoy, se quedaron mucho más atrás que las que sí tienen. En términos de creación de valor, por ejemplo, la pandemia resaltó una cantidad de problemas que existían de antes y que no se estaban solucionandos”, agregó Achondo.
Dos de los aspectos más importantes que debe considerar una propuesta de valor, según Pelayo, son el producto y/o servicio que ofrecemos, y el público y/o mercado al cual nos dirigimos. “Sobre el producto, es ineludible identificar qué es lo que estoy ofreciendo, si esto nació de una necesidad o de una innovación. Mientras que, por el otro lado, está el público y mercado, en donde al final, es básicamente imposible armar una propuesta de valor, si es que no conocemos al cliente en el cual nos estamos enfocando. Debemos realizar un estudio de mercado y conocer las necesidades de este”.
Alguna de las variables vistas para generar una propuesta de valor, toca temas como: precio, novedad, calidad, conveniencia, marca/status, desempeño, reducción de riesgo, reducción de costos, diseño y personalización, entre otras cosas.
A modo de conclusión, el emprendedor invitó a los estudiantes a responder una serie de preguntas para que se cuestionaran e identificaran de mejor manera el elemento diferenciador de sus proyectos de emprendimiento, realizando interrogantes que están dirigidas a la oferta de mercado, los atributos de la idea, la segmentación para cada producto y servicio, y la satisfacción de las necesidades dentro de sus propuestas de valor.
La próxima sesión del Programa de Emprendimiento estará a cargo de Alexander Urbina, docente de cursos de formación en tecnologías BIM.
Por: Cristian Contreras, Centro de Innovación Facultad de Ingeniería.