La Asociación Iberoamericana de Instituciones de Enseñanza de la Ingeniería (ASIBEI), realizó un bootcamp de innovación abierta, el que reunió a cientos de estudiantes de distintas facultades de Ingeniería asociadas a ASIBEI. La directora del laboratorio LEIND, del departamento de Ingeniería Industrial, Lorena Delgado, fue la encargada de dictar la charla sobre design thinking.
La Facultad de Ingeniería pertenece a ASIBEI, organización iberoamericana que propicia la discusión académica alrededor de temas de interés para la Ingeniería iberoamericana. En este punto, y debido a los cambios que se suscitaron en la enseñanza y aprendizaje debido a la pandemia, ASIBEI creó una comisión metodológica que diseñó una experiencia cercana a la del Rally latinoamericano de Innovación ,el que ha sido desarrollado en nuestra Facultad por el programa de innovación abierta Lions Up, con el apoyo de la subdirección de Relaciones Internacionales, unidad que dictó una charla especial sobre interculturalidad a los estudiantes participantes.
Además de esto, la académica Lorena Delgado, directora del laboratorio de emprendimiento e innovación LEIND, del Departamento de Ingeniería Industrial, fue la encargada de la charla sobre design thinking, la metodología que los estudiantes debieron ocupar para proponer una idea de solución a los objetivos de desarrollo sostenible que presentaba el torneo.
La académica, quien cursa su doctorado en innovación y es experta en gestión de espacios de innovación, detalló las etapas del proceso, junto con brindar herramientas y consejos para que el brainstorming de los equipos fuera fructífero, considerando las pocas horas de trabajo que tenían para estampar sus propuestas. “Esta metodología busca centrarse en el usuario para comprender su dolor. Hace años que se desarrolla en todo el mundo, porque te obliga a ponerte en los zapatos del usuario. Desde la empatía hasta el testeo, es necesario entender características y necesidades e identificarlas muy bien, porque eso despierta la creatividad y evita la dispersión. Cuando los puntos conectan, todo tiene sentido y se disfruta mucho el proceso de creación” indicó la académica.
Además, los estudiantes recibieron apoyo de cómo identificar el contexto del problema, por lo que las capacidades del entorno, necesidades y tendencias les podían dar un marzo adecuado a las soluciones, considerando que éstas deben ser cercanas a las personas. Junto con eso, la académica entregó aplicaciones tecnológicas que están siendo usadas para la gestión de ideas, algo fundamental para cuando el proceso se realiza en espacios virtuales.
Por Macarena Polanco
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